En el año 2017 el sector transporte público urbano tenía importantes barreras para acceder a financiación debido la pobre situación financiera de varios operadores en el país. Bajo este panorama, el gobierno de Bogotá requería reemplazar seis concesionarios de operación troncal de la Fase I y II de TransMilenio con los siguientes retos: i) diseñar un proyecto atractivo a inversionistas, ii) garantizar la continuidad del servicio, iii) promover el ascenso tecnológico de la flota con el objetivo de minimizar el impacto ambiental, iv) prever la capacidad requerida en el BRT en función de la demanda esperada v) anticipar los impactos de los proyectos de transporte masivo en la ciudad en la capacidad de flota futura y vi) lograr adjudicar el proyecto durante el periodo de gobierno vigente.
El proyecto se llevó a cabo en las siguientes etapas:
- Estudio estratégico, cuyo objetivo principal fue el análisis de diferentes esquemas transaccionales para la ejecución de los nuevos contratos del componente de operación del BRT. Este análisis fue desarrollado desde la perspectiva técnica, económica, legal y financiera y concluyó con la propuesta de un modelo transaccional: delegar la operación, bajo un esquema pionero en la operación de buses en Latinoamérica, a través de dos agentes: uno encargado de proveer la flota y otro encargado de la operación y el mantenimiento.
- Estructuración legal, técnica y financiera del Proyecto, que incluyó la elaboración de todos los documentos necesarios para realizar la licitación de los contratos de concesión, incluyendo prepliegos de condiciones, estudios previos junto con sus documentos de soporte, pliegos de condiciones, anexos, apéndices, proformas y minutas de contrato.
- Promoción del proyecto a nivel internacional, generando reuniones directas con los diferentes actores de la cadena de valor de la operación de transporte público y dos “Roadshow” en Londres y Bogotá.
- Acompañamiento en la licitación, adjudicación, legalización de los contratos y cierre financiero de los adjudicatarios.
Steer estuvo a cargo de la dirección de la estructuración integral y la estructuración técnica, dentro de la cual el equipo desarrolló la actualización del modelo de cuatro etapas, la definición de tipología y tecnología de la flota, el diseño operacional, la estructura de costo operacional de los agentes, dimensionamiento de infraestructura de patios, las especificaciones técnicas de la infraestructura ITS a bordo, el manual de operaciones y el manual de niveles de servicio.
Como resultado de nuestro trabajo, la ciudad delegó la operación a través de 5 contratos de provisión de flota y 5 de operación y mantenimiento, para 6 lotes de vehículos que en total sumaron 1181 nuevos buses articulados y biarticulados. La compra de buses requirió una inversión aproximada de USD 743 millones, mientras que los contratos de operación y mantenimiento se calcula exceden los USD 1300 millones.
Tres meses después, TRANSMILENIO S.A., utilizando las mismas bases de contratación, a través de un proceso de selección abreviada adjudicó el sexto lote, cumpliendo así el objetivo propuesto.
En total, se incorporaron a la operación 1441 vehículos, 741 de los cuales cuentan con motores de gas natural que cumplen con la norma de emisiones EURO VI y el resto con motores diésel y filtro de partículas lo que le permitió a Bogotá reducir el impacto del sistema sobre el medio ambiente.
Finalmente, por primera vez se encargó exitosamente la construcción de 3 patio-talleres a los operadores de transporte masivo de Bogotá, quienes los construyeron en tiempo récord.